Sorprendido

por Yonson

Recientemente recibí por Guá-Sá la conmemoración del acto del obelisco de 1983 con filmación incluida. Confieso que inicialmente no abrí el video ya que lo conocía de memoria, pero luego de unas horas no me resistí y lo volví a ver por enésima vez. No pude dejar de hacerlo, desde el principio y hasta el fin. Me estremeció casi como si lo estuviera viendo in situ, así como las tantas veces que, como esta, lo pude ver por video. Lo que más me llamo la intención en todas las veces que vi el acto fue la cantidad impresionante de gente. Todos llevamos banderas uruguayas, una muy insignificante cantidad lo hizo con estandartes político partidarios. Prácticamente todos los líderes políticos libres asistieron y estaban juntos, dando imagen de unidad. Como broche de oro destaco el excelente discurso, tanto en contenido como en la forma de desarrollarlo.

En otras palabras, me siento muy orgulloso que hayamos podido lograr semejante multitudinaria manifestación, sin el mas mínimo hecho de violencia. El éxito alcanzado en dicho acto seguramente fue de gran ayuda para salir de la dictadura de la mejor forma que se pudo también con valores de violencia insignificantes que no involucraron a las instituciones.

Me pregunto si hoy tendríamos la capacidad de reproducir un acto de tan alto nivel. Lamentablemente la realidad reciente me respondió duramente, pocos días después, con los sucesos del acto contra el G20.

Pudimos ver encapuchados con guantes vandalizando todo a su paso. No olvidemos que los vándalos respondieron al convocante Partido de los Trabajadores. Varios de los bienes vandalizados son propiedad de Trabajadores, cabe otra pregunta: ¿Trabajadores contra trabajadores?

Otros hechos del acto que llamaron la atención:

1. la virulenta manifestación, no revindicó ni solución a desaparecidos, ni mejora de salarios, ni educación, seguridad obvio que no; sí reclama sobre un acto o reunión que se hizo fuera del país.
2. Actuación casi nula de la policía y del Poder Judicial.

Si comparamos las imágenes del Obelisco con las del G20, parecería que estamos en franca regresión.

Comentarios

Don Yonson: me emocioné igual que usted por la filmación del acto del Obelisco. Aún recuerdo que para aplaudir y cantar teníamos que levantar los brazos de tan apretados que estábamos. Pero ese acto es incomparable. Y mucho menos con ese, de NO MAS DE 15 pelotudos, en una manifestación de 40 o 50. Obviamente no tienen reivindicaciones sobre desaparecidos o salarios o educación, Porque esas son reivindicaciones políticas y esos 15 no entienden un pomo de política; de anarquistas solo llevan la A que a gatas aprendieron a dibujar. Nunca tan cierto aquello de que son tan extremistas de izquierda que se parecen a los extremistas de derecha. Su actitud manifestativa es más parecida a las barras bravas de cualquier cuadro de fóbal al ganar un campeonato y festejar en 18.
Y por último, se salió de dictadura sufriendo violencia de la fuerte y jodida hasta el último momento: Roslik murió a causa de torturas en un cuartel el 16 de abril de 1984.
Daniel