Hay veces que las cosas importantes se hacen esperar. Pero al final llegan.
Nuestro sufrido pueblo oriental viene esperando desde hace mucho tiempo que se aclaren algunos delitos contra su propia Humanidad. Es decir: esperábamos que no solamente hubiera Verdad sino que también hubiera Justicia.
Claro, habían algunas trancaderas, algunos tibios, algunas complicidades y mucha, mucha desidia.
Pero ahora, nuestro más alto nivel de Justicia ha dado muestras del compromiso que tiene.
Hubieron algunas idas y venidas que hicieron que la nombráramos como Supremo Corte a la Justicia.
Pero ahora se reivindicaron completamente.
Casi sin problemas (están los desconformes de siempre y los libertinos, clavau!) pudieron poner freno a la desintegración de su poder. De su puño y letra surgió el "Reglamento sobre Indumentaria"(cliquee en el texto que lo verá).
Y allí, de manera harto progresista, verá que ya no más nadie, en un juzgado, (ni funcionarios, ni jueces y abogados, ni siquiera los que van a averiguar algo o los propios actores) podrá usar ropa "no adecuadas a la dignidad y el recato que tiene el Poder Judicial" (Sic). No más pantalones cortos o camisetas con dibujos "ofensivos, lascivos y/o discriminatorios" (sigue Sic). No más los dedos de los pies al aire en los hombres (las mujeres, seres un poco más inferiores en la escala zoológica, a las que si se le pueden ver los dedos, "pueden sí usar sandalias" - más Sic). En los actos protocolares "los hombres vestirán camisa, pantalón, saco y corbata" ... pero "el extremo inferior de la camisa irá siempre por dentro del pantalón". Las mujeres, más osadas, "vestirán chaqueta y pollera o pantalón" (otra vez Sic).
Ahora sí. Ahora que se la jugaron puedo esperar tranquilo.
Planes de veraneo en Valizas para jueces y actuarios del Poder Judicial. Llame YA! |
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