Llevá la galanga al cine (11)

A pesar de nuestra intención se está terminando el ciclo Llevá la galanga al cine. Esta es una nueva entrega sobre Cine de terror. A meterle si hay ganas de colaborar, porque lo que empieza -> termina.

Como sobrevivir en una película de terror

126. Nunca dudes si has visto algo raro. Si te pareció raro, ES raro

127. Cuando te metas en un cuarto oscuro nunca preguntes si hay alguien.

128. ¡Se paranoico! No confíes en nadie que no haya sido su amigo desde hace más de 15 años. Y si la película es de fantasmas o de gente poseída, no confíes ni siquiera en ese.

129. Tené cuidado con las cortinas que se mueven. ¿O acaso es normal que se muevan?

130. Si en cualquier parte de tu casa (léase armario, baño, sótano…) o en la valija de tu auto aparece un cadáver, no te molestes en salir corriendo a pedir ayuda ya que cuando vuelvas el cadáver no estará y encima te llamarán loco/a.

131. Aunque el muerto esté muerto y enterrado, aún te puede matar….

132. Si matás al malo (sobre todo en un incendio, cayéndose al mar en plena tormenta, en una explosión aunque sea nuclear…) asegurate de encontrar el cadáver. Si no seguramente volverá con más fuerza en la segunda parte de la película.

133. No te fíes de nada verde y viscoso, tampoco si parece metálico y habla como la radio Spica de nuestros abuelos, o si lleva un cuchillo grandote, o si te mira por encima de un diario abierto …en definitiva nunca te fíes de nada o nadie.

134. Si tenés alguna oscura historia en tu pasado donde alguien haya resultado herido o muerto, seguro que tarde o temprano lo pagarás.

135. Si estás atrapado en una casa, un barco, un avión, una nave espacial, con un monstruo o alguna cosa de esas, nunca digas que querés que todo se termine, para ver a tu novia o a tu mujer que hace meses que no las ves o que querés conocer a tu hijo recién nacido: seguro que terminás mal.

136. Si entrás a un cuarto que está oscuro, no intentes buscar la llave de la luz (porque no la encontrarás). El asesino siempre te estará esperando allí.

137. Las manos amputadas siempre cobran vida. Tené cuidado.

138. Los curas siempre ayudan. Los que no expulsan demonios saben Kung Fú.

139. Cuando tengas algún pergamino sobre invocaciones y demás, nunca lo leas en voz alta aunque el público no se entere de nada.

140. En las familias de psicópatas siempre se cumple eso de que “de tal palo tal astilla”.

141. Las leyendas urbanas siempre tiene algo de realidad y si no, ya se encargará un psicópata de hacerlas reales.

142. El sexo atrae el mal, así que no te hagas el semental que viene Jason y te da pa'tabaco

143. Si te encontrás en una ciudad desierta, pensalo. Seguro que es por algún motivo insalubre. ¡Mandate mudar de ahí!

144. Nunca vayas de una habitación a otra sin mirar atrás de la puerta… Siempre están ahí.

145. Nunca levantes a nadie haciendo dedo que se parezca a Papá Noel.

146. Si estás en un hotel en la mitad de la nada y de pronto entra un extraño muy nervioso y preocupado, es porque algo malo está a punto de pasar.

147. Si de las canillas empieza a salir sangre o una sustancia rara, ¡no llames a la OSE, pelotudo! Andate de la casa inmediatamente.

148. Si tus padres te dicen que no debés preocuparte, que los monstruos no existen, no les creas, rajá y no trates de salvarlos. Ya están condenados, no importa lo que hagas por ellos.

149. Si todos los habitantes de un pueblo o de un barrio te dicen que la casa, a la que te acabás de mudar, está embrujada y que nadie sobrevive una noche ahí… creéles.

150. Hacer el amor en el bosque, por la noche, es un camino seguro para una muerte sangrienta.