Pero La galanga no puede hacer menos que las editoriales serias. Ahora presentaremos a Uds, de manera periódica, al vate árabe (hijo de uruguayos) Jonathan Rodríguez. El muy sinvergüenza, después de leer sus odas en CX30 La Radio - 1130AM en el programa Cría Cuervos, las pasa acá, para que por fin tengan difusión.
El hito de Cristóbal (o Cristóbal hito)
Le decían: "¡qué redonda
ni redonda; puro verso!
¡Te vas a clavar las guampas
contra el fin del Universo!"
Siempre es muy, muy arriesgada
una aventura bien hecha.
Colón estaba más loco
que El Señor a Mi Derecha.
"A las Indias por el
Oeste".
¡Qué iluso, planeaba eso!
Como ir del Centro a Carrasco
cortando por los accesos.
Al capital hacia especias
le ofreció un camino nuevo.
Y a la reina, dice el mito,
la cautivó con un huevo.
El Rey cuando se enteró
que su jermu apoyó eso,
¡como accionista de Cosmo
se quedó de patitieso!
Tres carabelas le dieron
no más grandes que una lancha.
"¿Y precisás marineros?
Tomá ciento veinte
planchas".
Abya Yala los espera:
Ellos traen desde Europa
religión y gonorrea.
Más de dos meses el viaje.
Alguno medio alzadito
miraba a Colón pensando:
"¡qué lindo ese
cerquillito!"
Bajaron en tierra firme.
Luego, ya las invasiones:
la cruz, la espada, los bancos,
el reloj y los patrones.
Intercambios culturales,
rebeldía americana:
"Yo te agarro a vos La
Biblia
y agarrame la banana".
Lo cierto es que Don Cristóbal
murió, aunque usted no lo crea,
pensando que las Bahamas
eran Japón o Corea.
¿Cómo se explica tu historia?
¿Hombre brillante o suertudo?
¿Fuiste un genio o simplemente
un genovés argolludo?
No te juzgo, marinero.
En juicios no me aventuro.
Mas si fueses uruguayo
de una cosa estoy seguro:
si hoy vivieras llegarías
con un CUTCSA hasta la Luna.
Y ¿por qué no?, no exagero:
a Buenos Aires en Pluna.
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