In Invernum qualqum soreteae fiumo expelent

DEFINICIÓN


galanga (diccionario de la real Academia Española)

3. f. Bacín plano con borde entrante y mango hueco, para usar en la cama.

martes, 5 de agosto de 2014

¿Será necesario un casco?

Ha vuelto Fernando Neurocir, el Cascanueces de Malvín. Luego de una demora inusitada en su producción literaria La Galanga vuelve a engalanarse de su prédica.
Esta vez, con formato de Ciencia.
¡Albricias!


Trabajo científico: Uso de casco por parte de motociclistas en Rosario, Colonia.

Autor: Dr. Fernando Martínez

Tipo de trabajo: observacional descriptivo

Introducción:

Las recientes cifras presentadas por la UNASELVA (Unidad Nacional de Selguridad Vial y Anexos) nos alertan de que en Uruguay, muere una persona cada 16 horas en siniestros viales. Se ha puesto en evidencia que el uso de casco por parte de conductores de motocicletas y Otras Porongas de Dos Ruedas (OPDR de aquí en adelante), es bajo. Para este trabajo hemos definido como OPDR cualquier vehículo de 2 ruedas que no sea una moto como dios manda ni una bicicleta. Se incluyen entonces: motocicletas, motitos, scooters, bicicletas con motor eléctrico incorporado y ...bueno, otras porongas de dos ruedas.

Metodología:

Estudio observacional descriptivo. El autor del siguiente reporte salió a correr un domingo de tarde-noche (como a las 7 y pico) por Rosario. La corrida duró unos 56 minutos y por lo tanto, esa fue la duración de la observación.

El autor registró todas las motos y OPDR con las cuales se cruzó en ese periodo temporal en su memoria (que es bastante mala, pero ‘tá, nadie sale a correr con una laptop o una tablet). Algunos datos, el autor los fue registrando con los deditos de la mano, lo cual es bastante más creíble que la memoria de este energúmeno (nos referimos al autor). Así y todo, cuando se lo propone tiene memoria.

Resultados:

El autor se cruzó con 45 vehículos que podrían ser incluidos en el estudio, pero el número final se redujo a 42. En dos oportunidades, se trató de dos motitos que fueron vistas viajando rumbo al almacén y por lo tanto, el autor se los cruzó a la ida y a la vuelta (del almacén, obvio). El otro caso se trató de un auto con una luz quemada, que de lejos uno entraba como por un tubo que era una moto, pero al tenerlo casi arriba, el autor se percato que se trataba de un VW Passat capaz de confundir a cualquiera. Pero no catalogó finalmente ni para moto ni para OPDR.

Del total de 42 motos y OPDR, en 14 vehículos viajaba una persona, en 2 viajaban 3 personas y en 26 viajaban dos personas. Los porcentajes no los pongo porque no me dan las pelotas, en todo caso, calculen ustedes si quieren.

Por lo tanto, se detectaron un total de 72 personas viajando como choferes o acompañantes de birrodados.

Sobre la edad de los pasajeros, el autor no paró ninguna moto para preguntarle la edad a los conductores y acompañantes. Está loco, pero no tanto, así que los catalogó en adultos y botijas. Se incluyó en la categoría adulto a todo aquel que pareciera adulto y botija a todo aquel que fuera un botija. Los adolescentes entraron en la categoría adultos para simplificar.

Se identificaron 3 niños viajando (por suerte) como acompañantes.

Los niños viajaban en una moto con dos ocupantes (al parecer su papá o quien puso la firma para reconocerla) y los otros dos, viajaban en una moto con 3 ocupantes. Un niño viajaba adelante y otro, apretujado entre dos adultos.

En cuanto al uso de casco, de los 72 seres humanos identificados en este estudio, 9 usaban casco, lo que hace un total de algo mas del 10% (agarren las calculadoras, si quieren). De estos 9, dos tenían los cascos en la mano. Siete tenían el casco puesto en la cabeza.

Discusión y conclusiones:

Los uruguayos se caracterizan por creerse solidarios y modernos. Alguien nos metió el chuco de que somos la Suiza de América y nos lo creímos. Las recientes cifras obtenidas sobre la UNASELVA nos muestran a las claras que somos un país sudamericano mas.

Un reciente estudio de investigación mostró que al 87% de los uruguayos todo les chupa un huevo. Al restante 13%, les importan algunas cosas, como por ejemplo, que no les caguen la vida o que no les toquen el mate.

Este mismo estudio, evidenció que si se puede violar una norma, el 94% esta dispuesto a hacerlo. El otro 6% es el que tiene que hacer que las normas se cumplan y de este 6%, al 98% le chupa dos huevos si las normas se cumplen o no. Solo les importa que les paguen a fin de mes y si cobran cometa por las multas que ponen, mejor.

Esto pinta un panorama prometedor para Uruguay: seguramente se pase de tener un muerto cada 16 horas a tener uno cada 14 horas. O mejor, cada 12. En este sentido, los uruguayos saben superarse a si mismos y están acostumbrados a luchar contra la adversidad como en Maracaná. En este sentido, el Intendente de Cerro Largo sería una especie de Obdulio Varela moderno, que manda al carajo a todo el mundo y dice en voz alta (incluso como promesa electoral) que no va a controlar el uso de casco. Por otro lado, están los Intendentes que dicen que controlan pero no lo hacen un carajo en la práctica. Los efectos sobre la población son los mismos, pero estos nabos pierden votos.

Analizando los resultados del trabajo en curso, dos personas usaban casco en la mano. En una intensa búsqueda bibliográfica no encontramos ningún artículo en la literatura mundial que muestre una disminución de la incidencia de fracturas en la mano por llevar el casco allí. Puede ser entonces este, nuestro trabajo, made in Uruguay, el primero que abra la puerta de una serie de investigaciones que permitan cambiar el rumbo de la ciencia.

Por otro lado, 3 de 72 individuos que se juegan la vida a la lotería (perdón, que viajan en motos y otras porongas) eran niños. Sobre la ubicación de los mismos, dos botijitas iban sentados en el tanque de nafta del birrodado, con pantaloncitos deportivos. Todos sabemos como resbala el pantaloncito deportivo sobre el tanque y esperamos que el conductor del birrodado no se haya cruzado con un perro, pozo o auto, porque sino el botija estaría ahora orbitando alrededor de la tierra.

Otro niño viajaba entre dos adultos. El adulto que viajaba detrás del niño tenía un enorme culo (no suerte, un culo grande), por lo que si aplicamos medidas biométricas regresionales estadísticas, podemos asumir que toda la señora era grande. También esperamos que el vehículo en que viajaba esta criaturita no haya encontrado escollos en su dirección, porque sino el citado adulto de gran biomasa lo haría bosta.

Para finalizar, esperamos que estos datos puedan ser insumos posibles para los Intendentes o quienes deben fiscalizar el uso de casco. Si un inspector de tránsito se pusiera championes y saliera a fiscalizar, hubiera multado a 35 de 42 vehículos, además de bajar un poco la lustrosa panza que muestran debajo de esas hermosas camperas de cuero compradas con nuestros impuestos.

Conclusiones:

En menos de una hora me cruce con 42 vehículos de 2 ruedas. Solo 7 tenían ocupantes con cascos. Si fiscalizaran un poco podrían educar. Me lo tomo en joda, pero es triste de verdad.


Comentarios


Muy buena, Fernando. El justo tono para avivar sobre el drama de esos traumatismos al pedo que destruyen vidas.
Tano

1 comentario:

  1. Muy buena, Fernando. El justo tono para avivar sobre el drama de esos traumatismos al pedo que destruyen vidas.

    Tano

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