Hace más de 2 años, en la columna de Defensa del Idioma Castellano, había escrito una diatriba hacia los que hacían mal uso del participio activo y decían PresidentA (y no PresidentE, como debe ser) o IntendentA (y no IntendentE, por idéntica razón). Pueden refrescar su memoria entrando en http://www.lagalanga.blogspot.com/2012/05/mujeres-independientas-siempre.html
Con el Mundial de Fóbal todo el mundo hablaba de la Presidenta Dilma. Y con lo de los fondos buitres hablan de la Presidenta Cristina. Y con lo de los imbéciles que tiran la basura pa'fuera del contenedor hablan de la Intendenta Ana Olivera.
Claro que, para recuperar el término hacia lo femenino, no tienen inconveniente en arrasar con el participio activo Presidente (el que ejerce la Presidencia) encajando un Presidenta o un Intendenta que dan pavor.
Fíjense Uds. como quedaría la siguiente crónica:
Llega a su fin el Campeonato Mundial de Fóbal. Y la Presidenta Dilma Rousseff se prepara para dar sus palabras de despedida a los participantes y participantas del evento. Pero sobre todo, como mujer influyenta que es, dedicó parte de su discurso a prevenir las accidentas de carreteras. Es que Brasil tiene carreteras serpenteantas, peligrosas en las noches de luna menguanta o crecienta, y más si vamos en auto con casa rodanta. Así que para las amantas de las playas de arena hirvienta, no se confíen en las luces destellantas de las camionetas precedentas en el camino. Sean buenas oyentas de los ruidos de la ruta, marquen los recorridos con una lapicera fluorecenta y cuiden sus vidas resplandecientas, que aunque usen ropas relucientas o tengan una personalidad impactanta, un accidente puede ser fatal. ¡Qué joder!
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