Se largó la campaña electoral. Se vienen las elecciones.
Y todo el mundo despotrica contra ello: no es para menos. Griterío, vocingleras, pancartas, mugre. ¡Cuánto de todo esto nos estuvimos ahorrando cuando estábamos en dictadura y durante 13 años no se votó! gritó un nostálgico del Cuadrado Militar.
Sin embargo hay otra cantidad de gente que a pesar de todo les gusta cada tanto al menos elegir.
Hay gente para todo.
Pero estando en campaña quizás sea una buena oportunidad para analizar los partidos que están en pugna.
Uno de los partidos (y bien partido) es el Partido Bermellón; el de Rivera y Batlle y Ordóñez (¡qué casualidad: en la esquina del Cementerio!).
A pesar de la catástrofe electoral en la que se haya desde hace unos 14 años (solo superada por la catástrofe moral de ser el partido de los presidentes que dieron los golpes de estado en 1933 y 1973) es el segundo de los que más candidatos tiene. Si contamos bien van 5: Sangrinetti, Talqui, Amorir Batlle, Martínez Nomarioff y otros de apellido casi imposible de escribir: Glonofsky o algo así. Cinco para competir por un poquito más del 10% del electorado parece mucho, pero las cosas son así.
El último en subirse al carro fue el veterano Sangrinetti. En cualquier ómnibus dejan subir primero a los viejos; en este carro fue el último, seguramente cuando se daba cuenta que el carro se iba sin su presencia.
Y con Sangrinetti a la cabeza de las encuestas de su interna, el partido Bermellón podrá tener algunas características que, bien explotadas, pueden seducir a buena parte del electorado.
- Es un candidato que no tiene porqué seguir las orientaciones de sus mayores en el partido. Por el contrario: seguramente oirá y dará participación a los que son 10 a 15 años más joven que él.
- Al terminar su mandato le quedarán muy pocos años para pagarle la jubilación, con el ahorro que eso implica.
- La elección del vicepresidente tendrá una importancia hasta ahora desconocida.
- En vez de tablets para cada niño se pondrá en práctica el slogan: Un político - una sonda vesical.
- Estaremos más cerca de figurar en el récord Guiness.
- Mejorará la señal de Jetalibro (o Facebook) cuando juegue Penadoy.
- Adquirirá validez absoluta el dicho No hay dos sin tres.
Comentarios
Sencillamente Notable el artículo y primordialmente Real!!! Sigan asi
Pepe
Espectacular. Pero hay que reconocer que con el Sangui los Bermellónes me juego sacaran algun voto más.
Tano
Sencillamente Notable el artículo y primordialmente Real!!! Sigan asi
ResponderEliminarEspectacular. Pero hay que reconocer que con el Sangui los Bermellónes me juego sacaran algun voto más
ResponderEliminarTano