Y luego de varios decenios de trabajo en esa función el anecdotario que se recolecta es tan abrumador como el hipocrático.
Todas las anécdotas son rigurosamente verídicas. Solo se omiten los nombres y apellidos para evitar tener que pagar más pensiones a la invalidez.
Aquí les presentamos la quintaq entrega de Violetero, en su nueva columna.
Y por supuesto hay mucho más
NO
ERA ASI
-¿Usted está enojada conmigo por algo? – le pregunta la pagadora a domicilio a la afiliada, al notar la “cara de malos amigos” que le mostraba.
-¿Cómo no voy a estarlo; si usted abandonó a su marido y lo dejó con sus tres hijos al pobre hombre? – le responde la señora.
La compañera no salía de su asombro
y le pregunta:
-¿Quién le dijo esa mentira?
-El pagador que vino el mes pasado
me dijo: “el mes que viene le va a venir a pagar mi señora. Es una mala
persona; me abandonó y me dejó con mis tres hijos” – le dice la señora.
Era todo mentira. Simplemente el
compañero le quiso hacer una broma a ella. Cuando la compañera llegó a la
oficina casi lo mata al gracioso.
GEOMETRÍA
Esta es de un custodia policial que
venía en el coche con nosotros en un día de pago.
Buscábamos un domicilio; ese policía
y yo del lado derecho y el chofer y el otro policía, del lado izquierdo.
De repente, el policía ubicado
detrás de mí grita:
-¡Miren que buena que está esa casa!
, y señala con su dedo índice a la cual se refería.
-¿Qué tiene tanto de bueno esa casa?
– le pregunta el otro policía.
-Que está revestida toda de ladrillo
espejo – le contesta.
-Hay muchas casas que están revestidas
así – le responde el otro.
-Si – le responde el primero – pero
todas tienen los ladrillos acostados y ésta los tiene parados.
-¿Y eso que tiene de bueno? –
pregunta nuevamente el segundo policía.
-¿Sabés cuántos ladrillos ahorrás? –
le responde.
Creo que este policía no salvó el
examen de geometría.
DICTADURA
Otra
de policías.
En plena dictadura, abonando a
domicilio en el Centro de la ciudad, estaciono el coche y me bajo para efectuar
tres pagos. Le advierto al custodia policial que puedo tardar unos minutos y
que para no aburrirse, encendiera la radio del coche.
Retorno a los diez minutos y el
policía estaba escuchando el Informativo y el relator de turno dice algo así
como:
“Fue remitido a la cárcel Floriano
Almeida Rodríguez, oriental, casado de 43 años de edad, por pérdida inherente a
los deberes de la Patria
Potestad ”
-¡Qué tarado – exclamó el policía y
se agarró la cabeza - ¡en estos momentos de dictadura ¿a quién se le ocurre protestar
contra la patria?!
No hay comentarios:
Publicar un comentario