Acá queda demostrado que hay que elegir bien la iconografía acompañante de la pauta publicitaria. No alcanza que sea una foto de la gran pauta; debe ser adecuada para el efecto que se busca conseguir. De lo contrario puede convertirse, cual bumerang, en una antipática antipauta.
Se trata de una publicidad realizada en EE.UU. en 1919, utilizada como campaña antialcohol.
En la pancarta sostenida por el grupo de damas se puede leer: "LOS LABIOS QUE TOCAN EL LICOR NO TOCARÁN LOS NUESTROS".
¿Cuántos norteamericanos Uds. creen que dejaron de tomar y cuántos otros creen que se emborracharon inmediatamente?
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