Y esto sigue (con su ayuda o sin su ayuda)
Como sobrevivir en una película de terror
76. Si sos el típico/a tipo/a más popular del liceo no
esperes vivir por mucho tiempo.
77. No seas el científico malo, porque tus creaciones genéticas se volverán en contra tuyo y serás el primero que la quede.
78. Nunca, nunca, nunca, JAMÁS digas “Volveré enseguida”.
79. Si te toca ser el malo de la película mantenete alejado de los trituradores de basura si no querés perder algún miembro.
80. Cuando creas que ya has matado al malo, no te confíes, ya que él se levantará de nuevo cuando te hayas dado vuelta. Reventale la cabeza sin piedad porque los malos son muy ladinos y muy resistentes.
81. Si sos un actor principal y pedís un aumento de sueldo en la segunda parte de la peli, porque la primera fue todo un éxito, olvidate de aparecer en la tercera parte: tu muerte será inminente y de la manera más absurda que jamás hayas visto.
82. Si decidís, en plena noche, tomarte algo fresco de la heladera, la abrís, y la cámara toma un primer plano de la puerta de la heladera abierta… mejor no la cierres, es preferible que se descongele la comida a perder la vida.
83. Si acabás de tener un hijo y tenés la brillante idea de llamar al bebé “Jason” o “Damien” ¡¡Allá vos!! Después no vengas arrepentido/a.
84. Si sos el malo de la película y estás amenazando (cara a cara y con un arma) al bueno quedando 10 minutos de rodaje, ¡no te molestes en contarle detalladamente tus planes de cómo destruirás tal o cual cosa o cómo vas a matarlo! ¡vejiga!, porque el tiempo pasa y nunca conseguirás realizar tus malvados planes. Es más, tenés un 99,99% de probabilidades de acabar fiambre.
85. Cuando mires en una habitación esperando encontrarte el
malo con un cuchillo de cocina, un hacha, una motosierra, etc… y no lo veas, saltá por la
ventana, porque en caso contrario cuando te relajes aparecerá en
cualquier sitio, aunque ya lo hayas inspeccionado anteriormente.
86. Si estás en un ambiente de tranquilidad y empezás a escuchar una música estridente, con notas cortas y rápidas, pizzicato de violines ¡¡¡batí el record de 1000 metros con obstáculos, nabo!!!
87. Si has acorralado al malo de la película y le estás apuntando con un arma, no seas curioso y no le preguntes el porqué de las cosas, aunque lo creas desarmado y haya tiempo de rodaje. Vos tirá y luego preguntá.
88. Si es de noche y estás sólo/a, mejor será que no oigas una voz que susurra tu nombre… o la cagaste.
89. Nunca, nunca, nunca te dirijas a una persona que gira su cabeza más de 180º, o que habla al revés.
90. Si es de día y el cielo se empieza a cubrir rápidamente… agarrá un arma potente (esto también es aplicable si es de noche y de repente suenan truenos).
91. Si ves una grieta en el suelo y una luz rojiza saliendo de ella, yo que vos cambiaba de dirección.
92. Cuidado con los doberman de ojos rojos, que pueden ser muy exóticos, pero también son mortales.
93. Nunca entres a un edificio parecido a una catedral, pero con estatuas raras y crucifijos al revés.
94. Si ves una tabla con letras, no le des pelota; sobre todo si tiene un triángulo que se mueve sólo.
95. Nunca suele ser la mejor solución para escapar del monstruo/asesino el subir hasta la azotea o el piso superior de una casa o edificio. Allí podrás, además de ser acuchillado / estrangulado / devorado, caer desde una altura considerable.
96. No creas que tener un amigo karateka para
que te proteja mejora las cosas. Esos descerebrados suelen ser los
que primeros en morir.
97. No te molestes en correr, ya te lo dijimos antes: el asesino/monstruo siempre aparecerá adelante tuyo, aunque él vaya bamboleándose y a los tumbos y vos corras como un Olímpico.
98. Nunca, nunca, nunca creas que el mejor sistema para ver si hay alguien detrás de una puerta es abrirla… Lo primero que verás es un objeto brilloso y punzante.
99. No importa que hayas conseguido sobrevivir a una película de terror. Igual podés morirte en la 2ª parte.
100. Aunque Michael Moore diga que hay (al menos) un arma en el 90% de las casas estadounidenses, ni los protagonistas ni sus amigos podrán acceder a ninguna de ellas para defenderse.
77. No seas el científico malo, porque tus creaciones genéticas se volverán en contra tuyo y serás el primero que la quede.
78. Nunca, nunca, nunca, JAMÁS digas “Volveré enseguida”.
79. Si te toca ser el malo de la película mantenete alejado de los trituradores de basura si no querés perder algún miembro.
80. Cuando creas que ya has matado al malo, no te confíes, ya que él se levantará de nuevo cuando te hayas dado vuelta. Reventale la cabeza sin piedad porque los malos son muy ladinos y muy resistentes.
81. Si sos un actor principal y pedís un aumento de sueldo en la segunda parte de la peli, porque la primera fue todo un éxito, olvidate de aparecer en la tercera parte: tu muerte será inminente y de la manera más absurda que jamás hayas visto.
82. Si decidís, en plena noche, tomarte algo fresco de la heladera, la abrís, y la cámara toma un primer plano de la puerta de la heladera abierta… mejor no la cierres, es preferible que se descongele la comida a perder la vida.
83. Si acabás de tener un hijo y tenés la brillante idea de llamar al bebé “Jason” o “Damien” ¡¡Allá vos!! Después no vengas arrepentido/a.
84. Si sos el malo de la película y estás amenazando (cara a cara y con un arma) al bueno quedando 10 minutos de rodaje, ¡no te molestes en contarle detalladamente tus planes de cómo destruirás tal o cual cosa o cómo vas a matarlo! ¡vejiga!, porque el tiempo pasa y nunca conseguirás realizar tus malvados planes. Es más, tenés un 99,99% de probabilidades de acabar fiambre.
86. Si estás en un ambiente de tranquilidad y empezás a escuchar una música estridente, con notas cortas y rápidas, pizzicato de violines ¡¡¡batí el record de 1000 metros con obstáculos, nabo!!!
87. Si has acorralado al malo de la película y le estás apuntando con un arma, no seas curioso y no le preguntes el porqué de las cosas, aunque lo creas desarmado y haya tiempo de rodaje. Vos tirá y luego preguntá.
88. Si es de noche y estás sólo/a, mejor será que no oigas una voz que susurra tu nombre… o la cagaste.
89. Nunca, nunca, nunca te dirijas a una persona que gira su cabeza más de 180º, o que habla al revés.
90. Si es de día y el cielo se empieza a cubrir rápidamente… agarrá un arma potente (esto también es aplicable si es de noche y de repente suenan truenos).
91. Si ves una grieta en el suelo y una luz rojiza saliendo de ella, yo que vos cambiaba de dirección.
92. Cuidado con los doberman de ojos rojos, que pueden ser muy exóticos, pero también son mortales.
93. Nunca entres a un edificio parecido a una catedral, pero con estatuas raras y crucifijos al revés.
94. Si ves una tabla con letras, no le des pelota; sobre todo si tiene un triángulo que se mueve sólo.
95. Nunca suele ser la mejor solución para escapar del monstruo/asesino el subir hasta la azotea o el piso superior de una casa o edificio. Allí podrás, además de ser acuchillado / estrangulado / devorado, caer desde una altura considerable.
97. No te molestes en correr, ya te lo dijimos antes: el asesino/monstruo siempre aparecerá adelante tuyo, aunque él vaya bamboleándose y a los tumbos y vos corras como un Olímpico.
98. Nunca, nunca, nunca creas que el mejor sistema para ver si hay alguien detrás de una puerta es abrirla… Lo primero que verás es un objeto brilloso y punzante.
99. No importa que hayas conseguido sobrevivir a una película de terror. Igual podés morirte en la 2ª parte.
100. Aunque Michael Moore diga que hay (al menos) un arma en el 90% de las casas estadounidenses, ni los protagonistas ni sus amigos podrán acceder a ninguna de ellas para defenderse.
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